Técnicas
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GOHO
JUHO
SEIHO

        Desde siempre el hombre ha ideado métodos de defensa para protegerse a sí mismo y a su entorno, llegando a idear auténticos sistemas de defensa sin armas. De la evolución de estos métodos es de donde nos han llegado las técnicas englobadas en lo que llamamos Artes Marciales.

        El Shorinji Kempo posee un vasto arsenal técnico dividiéndose sus técnicas de mano en dos grandes grupos: GOHO y JUHO. Además existen otra serie de técnicas conocidas como SEIHO para la salud del practicante. Esta variedad de técnicas va a permitir al practicante de Shorinji Kempo moverse en cualquier distancia de ataque, es decir distancias largas (empleo de técnicas de pierna), distancia media (empleo de técnicas de mano) y distancia corta (empleo de técnicas Juho o de luxación).

        Al contrario que en otras Artes Marciales, en Shorinji Kempo no se endurecen las manos de una forma especial puesto que no hace falta. La técnica del Shorinji Kempo lleva los golpes a sitios precisos localizados en el cuerpo humano. El golpe de un kenshi (nombre con el que se conoce al que practica Shorinji Kempo) va a ir dirigido a puntos estrechamente relacionados con centros nerviosos y/o de acupuntura (puntos que sirven tanto para curar como para dañar el cuerpo humano). Así por ejemplo una patada frontal no se para en la tibia intentando romperla, sino que se para a un lado de la tibia consiguiendo parar la patada y además de daño al adversario, motivado por el sitio donde se para, se puede quedar paralizada (dependiendo de la intensidad de nuestra defensa) durante un espacio de tiempo.

        Otra de las características es que al golpear se va a utilizar la fuerza de todo el cuerpo y no solo la de nuestras piernas y/o brazos. Esto conlleva una mayor dificultad a la hora de aprender las técnicas puesto que es más fácil golpear sólo con el puño que proyectar toda la fuerza de nuestro cuerpo en el puño. En esta tarea va a jugar un papel primordial las piernas (como fuente de proyección) y la cadera (como fuente de dirección y profundización). Al dominar esta técnica se puede explicar como personas más "débiles" que conocen su verdadera fuerza pueden llegar a vencer a adversarios más "fuertes" que sólo conocen la fuerza de sus bíceps.

        También es importante el ángulo del golpe. En Shorinji Kempo todos los golpes llevan una fuerza ascendente motivado porque nuestro cuerpo esta diseñado, básicamente, para soportar las fuerzas descendentes de la gravedad. Pero reacciona toscamente ante fuerzas ascendentes y por tanto los daños son mayores.

        Otra característica va a ser que el cuerpo mientras está en guardia va a estar "relajado" de forma que se consiguen los siguientes beneficios:

  • Mayor ahorro energético que se traduce en un menor cansancio muscular.
  • Movimientos más rápidos, ya sean de defensa como de ataque, al existir menos tensión muscular que frene el movimiento.
  • Golpes explosivos. En Shorinji Kempo la fuerza se pone en el último instante a la hora de golpear, por ejemplo con puño, y una vez dado el golpe se vuelve a relajar el puño.

        Por otro lado tanto los puños como las piernas cuando se usan para golpear han de retornar rápidamente a su posición de partida para permitir un nuevo ataque o una defensa. Además al retornar con velocidad se va a producir otra peculiaridad de las técnicas del Shorinji Kempo y es que los golpes son profundos (no se golpea a la superficie) y se producen los efectos de un golpe de látigo en vez de un golpe estático. Esto va a permitir cerrar huecos rápidamente así como que los efectos sean más devastadores que en un golpe estático. Esto último explica por qué en Shorinji Kempo se enseña filosofía para que la persona sea equilibrada, se intenta que el hombre sea más humano y no un cyborg de guerra sin escrúpulos.

 

        De todo lo comentado en este apartado he de llamar la atención sobre el hecho de que desde el primer día se enseña al practicante de Shorinji Kempo que las técnicas aprendidas no se deben de usar nunca salvo en caso de extrema necesidad. Se ha de trabajar por la paz y no para la guerra. No será la última vez ni la primera vez que se expulse a alguien de la práctica del Shorinji Kempo por su aspecto agresivo o se le llame la atención a un kenshi por exhibir sus técnicas en público para llamar la atención de alguna manera.